miércoles, 14 de abril de 2010

¿QUÉ ES LA XEROJARDINERIA?

La Xerojardinería es el diseño de jardines de calidad que conservan agua y protegen el medio ambiente. Con la puesta en práctica de siete principios de sentido común, usted puede crear un jardín exuberante y hermoso que le ahorre tiempo, dinero y energía y que evite la contaminación y el derroche del agua.

1. Comience con un plan. Tenga en cuenta el tipo de suelo, el drenaje, la disponibilidad de agua y el paisaje. Considere cómo se usará el espacio—para juegos, atención de invitados, jardines, almacenamiento, etc. Planee tener áreas que requieran diferentes cantidades de agua—riego a mano, riego frecuente, riego ocasional y lluvia. Prepare un plan que pueda ponerse en práctica en fases, según lo permita su tiempo y su presupuesto.

2. Analice y mejore la tierra. Comuníquese con la Oficina de Extensión del condado o con su vivero local para que examinen su suelo. La mayoría de los terrenos se beneficiarán del uso de materia orgánica como el abono. Esto mejorará el drenaje, la penetración de la humedad y la capacidad del terreno de retener agua.

3. Use las áreas con césped para fines prácticos. El césped, por lo general, necesita más agua que cualquier otra planta del jardín. Piense cómo utilizará el área y si el césped es la mejor opción. Puede que lo sea, pero las plantas de sotobosque, los arbustos, una terraza o un patio podrían ser mejor en algunos casos.

4. Seleccione plantas apropiadas. Utilice plantas nativas o resistentes a la sequía tanto como sea posible. Hay cientos de plantas hermosas que crecen de forma natural con la cantidad de lluvia que recibimos en el norte de Texas, así que raramente necesitan riego adicional una vez que se arraigan.

Sin embargo, si tiene una planta preferida que necesita mucha agua, adelante, úsela. Simplemente colóquela con otras plantas que consuman mucha agua.

5. Riegue de forma eficiente para aprovechar cada gota. Observe si las plantas necesitan agua y riéguelas sólo cuando sea necesario. Cuando riegue, hágalo con suficiente agua en las raíces. Esto ahorrará agua y ayudará a la planta a desarrollar raíces más saludables, lo que aumenta su probabilidad de sobrevivir en los veranos cálidos y en los inviernos fríos. Riegue temprano en la mañana cuando haya poco sol y poco viento.

Los aspersores que se conectan a las mangueras más eficientes lanzan gotas de agua grandes cerca del suelo. Cuando se usan aspersores de rocío o aspersores que arrojan agua hacia arriba, con frecuencia el agua se evapora antes de llegar al suelo. Las mangueras de remojo son baratas, fáciles de instalar e ideales para los lechos de plantas. El riego por goteo aplica agua lentamente justo sobre las raíces de las plantas.

6. Utilice cubiertas vegetales para conservar el agua y disminuir el crecimiento de la maleza. Las cubiertas vegetales reducen la pérdida de agua en el terreno y la erosión. Algunos tipos de cubiertas vegetales comunes incluyen la corteza de pino, el ciprés triturado, las cáscaras de nuez pacana, las cáscaras de semillas de algodón, las hojas de abono, el cedro triturado y la hierba de jardín desmenuzada.

7. Haga un buen mantenimiento. Los jardines xerófilos necesitan menos mantenimiento que los jardines tradicionales. Pero un jardín bien mantenido es más fuerte y puede soportar mejor la sequía, la congelación y los problemas de plagas. Revise una vez al año si las plantas leñosas, como árboles o arbustos necesitan podarse. La madera muerta, enferma o dañada puede ser retirada en cualquier momento. Las plantas de floración perenne pueden necesitar una poda frecuente para estimular el florecimiento y mantener una apariencia limpia. Retire la mala hierba a fin de que no compita por el agua de otras plantas. Eleve la altura de la cortadora de césped de modo que las cuchillas de césped no dañen las raíces.

Fertilice con moderación. Demasiado fertilizante aumenta la necesidad de agua de las plantas y puede ser lavado por la lluvia, lo que contamina nuestros ríos y arroyos. Deje sobre la hierba los restos de césped cortados como fertilizante natural.

jueves, 8 de abril de 2010

7. Selección de las especies vegetales:

Aunque por definición la palabra xerojardinería significaría una jardinería seca o austera, en realidad no significa eso exactamente, sino una jardinería que procura el ahorro de agua, cosa que se consigue teniendo en cuenta los principios en los que se basa, especialmente en lo concerniente al empleo de plantas adaptadas a las condiciones del lugar y que consuman poco agua.

En general, a la hora de seleccionar los elementos vegetales de cualquier diseño hemos de tener en cuenta una serie de criterios, que se reflejan en el siguiente cuadro:
Criterios básicos para seleccionar las plantas
Criterios medioambientales:

- Adaptación al clima
- Requerimientos edafológicos e hídricos
- Resistencia a plagas y enfermedades y a la polución
- Necesidades de sol o sombra

Criterios paisajísticos:
- Porte y forma
- Tasa de crecimiento y desarrollo
- Textura
- Color y estacionalidad

7.1. Criterios medioambientales
Estos factores afectan a la salud de las plantas y pueden comprometer seriamente su cultivo si no son tenidos en cuenta, lo que podría traer consigo el fracaso de nuestro diseño.

7.1.1. Adaptación al clima
Las plantas, como seres vivos que son, se comportan ante el clima de formas muy diversas y que dependen de numerosos factores, por lo que su encasillamiento en grupos definidos en cuanto a su resistencia al frío, que es uno de los principales factores limitantes para su cultivo, es una tarea algo complicada.

Ahora bien, sin duda es posible hacer grupos en función de su tolerancia a unos mínimos de temperaturas por debajo de los cuales su cultivo comienza a ser problemático, deteniéndose el crecimiento, sufriendo daños, en ocasiones irreversibles, o llegando a la muerte.

Por todo ello, para encasillar a las plantas ornamentales en grupos en relación con su resistencia al frío, se han definido las denominadas zonas de rusticidad, basadas en la media de las temperaturas mínimas absolutas alcanzadas durante un período de años lo suficientemente amplio.

7.1.2. Requerimientos edafológicos e hídricos
El suelo es un sistema complejo y dinámico con cuatro componentes básicos:

a) Materia inorgánica o mineral, formada por piedras, arena, limo y arcilla. La proporción en que se encuentran cada uno de estos materiales define la textura de un suelo y la forma en que se agregan definen su estructura.

b) Materia orgánica, formada por materia en descomposición y organismos vivos, que aportan nutrientes, mejoran la estructura del suelo y ayudan a mantener la humedad y la fertilidad.

c) Aire, que se mueve a través de los poros, proporcionando oxígeno a las raíces. Cuanto más compacto es un suelo peor es su estructura y menor es su porosidad.

d) Agua y nutrientes en disolución, que también se mueve a través de los poros, afectándole de igual forma negativamente la compactación.

Una buena textura y estructura con una porosidad adecuada incide de manera notoria sobre el desarrollo de las plantas.

Un suelo ideal sería aquel que tuviera un 45 % de materia inorgánica, 5% de materia orgánica, 25 % de agua y 25 % de aire, pero eso rara vez se cumple, y menos en nuestras ciudades, donde los suelos están muy alterados, empobrecidos y compactados.

Otro factor importantísimo que influye en el éxito o fracaso del cultivo de una especie es el pH, que mide la acidez del suelo y afecta a la disponibilidad de nutrientes y actividad microbiana.

La mayor parte de las plantas ornamentales vegetan bien en un rango de pH entre 6 y 8.

La presencia de cloruros y carbonatos, principalmente de sodio y calcio, puede ser igualmente un problema pues alteran el pH y la disponibilidad de nutrientes, causando problemas osmóticos en las raíces, lo que se traduce en un empobrecimiento de la vegetación.

Las características de un suelo pueden ser modificadas mediante labores de fondo, enmiendas, estercolados, instalación de drenajes, etc.

Pero como estas modificaciones pueden resultar excesivamente caras cuando se trata de grandes superficies, puede ser más recomendable en ciertos casos utilizar especies que se adapten bien a las condiciones existentes.

En cuanto al agua sabemos que las plantas funcionan como un complejo hidráulico, bombeándola desde las raíces hasta todas las células de su organismo; cuando el agua escasea o falta suele apreciarse una disminución de turgencia en sus tejidos, siendo ello especialmente visible en las hojas, que decaen y languidecen.

Pero no todas las plantas tienen las mismas necesidades hídricas, pues las hay tolerantes a circunstancias muy variables; en general podemos decir que las plantas propias de climas mediterráneos, adaptadas a una insolación intensa y a la escasez de precipitaciones, son muy adecuadas para la xerojardinería y la jardinería pública en general debido a su rusticidad.

7.1.3. Resistencia a plagas y enfermedades
Existen plagas y enfermedades, a veces muy dañinas, que afectan de una manera especial a ciertas especies de plantas, como por ejemplo la antracnosis en el plátano de sombra, la grafiosis en los olmos, el fuego bacteriano en muchas rosáceas, el oidio en rosales y evónimos, etc.

Hemos de tener en cuenta esta circunstancia para utilizar estas especies con precaución y, sobre todo, tratar de buscar la mayor diversidad posible.

Si utilizamos solo 2 ó 3 especies de árboles para las calles de nuestra ciudad corremos el riesgo de que una plaga o enfermedad acabe con gran parte de ellos, lo que nunca ocurriría si utilizamos 15 ó 20 especies diferentes.

Hay que decir que la resistencia natural de las plantas al ataque de plagas o aparición de enfermedades disminuye si otras necesidades vitales no son satisfechas, como la falta de luz, suelos pobres y compactados, carencia de nutrientes, etc.

7.1.4. Resistencia a la polución
La atmósfera de nuestras ciudades, especialmente las de gran densidad de población, sufre una contaminación importante, siendo más alta en puntos concretos con mucho tráfico rodado y en las áreas industriales.

No todas las plantas resisten de igual forma estas circunstancias, ya que la polución va depositando sobre sus hojas una fina capa de partículas que puede llegar a disminuir o inhibir su función clorofílica.

Normalmente los efectos de la contaminación atmosférica en las plantas incluyen "quemaduras" en las hojas, caída prematura del follaje, amarillamientos y clorosis, detención del crecimiento, aborto de la floración, etc., siendo los síntomas a menudo parecidos a los producidos por deficiencias nutricionales o ciertas enfermedades.

Existen dos clases de contaminantes atmosféricos, los primarios, que son emitidos directamente por la fuente emisora, como los aerosoles o partículas en suspensión, óxido de azufre, óxido de nitrógeno, hidrocarburos, monóxido de carbono, etc., y los secundarios, que se forman por la reacción de los contaminantes primarios con los componentes naturales de la atmósfera, como el ozono, cetonas, aldehídos, peróxido de hidrógeno, nitrato de peroxiacetilo, sulfatos, nitratos, etc.

Todas las plantas no presentan el mismo grado de resistencia frente a la polución atmosférica, debiéndose tener en cuenta este aspecto especialmente cuando se diseñan zonas verdes en zonas industriales o centros urbanos con mucha densidad de tráfico.

7.1.5. Necesidades de sol o de sombra
La mayoría de las plantas gustan de una exposición soleada o con ligera sombra; muchas toleran la sombra durante ciertas horas al día, y algunas gustan de la sombra total, es decir, no toleran la acción directa de los rayos solares, aunque ello no significa necesariamente ausencia de luz, pues a menudo requieren de buena iluminación, como el caso de muchas de nuestras populares plantas de interior.

Este aspecto debe conocerse para ubicar las plantas en las situaciones y exposiciones más convenientes.

De una forma general, las exposiciones orientadas al norte son más frescas y reciben menos insolación, justo todo lo contrario de las exposiciones orientadas al sur.

Es importante a la hora de realizar un diseño, especialmente cuando la zona a tratar se encuentra entre edificaciones, definir un plano de sombras, pues de esta forma tendremos claro donde ubicar las diferentes especies en función de sus mayores o menores necesidades de luz y sol.

7. 2. Criterios paisajísticos
Estos factores afectan al diseño y normalmente no repercuten en la salud de las plantas, pero no tener en cuenta el crecimiento y desarrollo podría influir con el tiempo en la calidad estética de las plantas y, en ciertos casos, en una disminución de su vigor natural, bien por la competencia con otros vegetales o con las edificaciones circundantes.

Algunos ejemplos de xerojardinería
7.2.1. Porte y forma
Uno de los mayores atractivos de las plantas son sus floraciones, pero raras veces éstas ocurren a través de todo el año, existiendo períodos, más o menos largos, en que la planta carece de ese atractivo.

Por ello, la forma y la textura son otros de los aspectos a tener en cuenta a la hora de seleccionar las especies.

El porte y la forma de las plantas vienen determinadas normalmente por el tallo y su forma de ramificar.

Existen tallos herbáceos, normalmente verdes y flexibles, y tallos leñosos, lignificados, rígidos y cubiertos de una corteza.

Los vegetales herbáceos normalmente no alcanzan mucha altura, como las plantas anuales, bulbosas o gramíneas; las plantas leñosas soportan mayor peso y sus tallos pueden alcanzar considerables alturas, como los árboles, arbustos y plantas trepadoras.

En cuanto a la forma, definida normalmente por la manera de ramificar los tallos, éstas pueden ser columnares, cónicas, rectangulares, aparasoladas, lloronas, redondeadas, postradas, piramidales, etc.

Hay plantas leñosas que admiten bien las podas y los recortes, por lo que podemos darles artificialmente la forma deseada, constituyendo un caso extremo la topiaria.

Este tipo de plantas y el uso de estas técnicas son propios de los jardines formales, más geométricos y arquitectónicos, mientras que los jardines informales y paisajistas, imitando en cierto modo a la Naturaleza, dejan al vegetal desarrollarse de una forma lo más natural posible.

7.2.2. Tasa de crecimiento y desarrollo
Otro aspecto a tener en cuenta a la hora de seleccionar las plantas, especialmente importante en el caso de arbustos y árboles, es la velocidad de crecimiento y el desarrollo que puede alcanzar cada una de las especies.

Con frecuencia vemos plantaciones en las que no se han tenido en cuenta estos factores, y lo que en un principio aparentaba cierta armonía, con el paso del tiempo se iba convirtiendo en una vegetación caótica en la que los vegetales competían unos con otros por el espacio, estorbándose mutuamente, o en la que se iban perdiendo las proporciones al tener las diferentes especies utilizadas velocidades de crecimiento y/o portes muy dispares.

En ocasiones, y de una forma deliberada, se pueden realizar plantaciones con una densidad mayor de la aconsejable, pero con el paso del tiempo, y a medida que se van desarrollando las plantas, deben realizarse entresacas, manteniendo, de esta forma, el espacio vital necesario para cada una de las plantas.

7.2.3. Textura
La textura de las plantas viene dada por la forma, tamaño, disposición y características de sus hojas, definiendo la superficie de las zonas ajardinadas y creando contrastes, ya que las superficies lisas y brillantes reflejan la luz, mientras que las rugosas o afieltradas la absorben.

El uso de una misma textura, por tanto, produce monotonía, mientras que su diversidad crea un interés visual.

La textura normalmente va íntimamente ligada al color, percibiéndose ambos conjuntamente.

En cuanto al tacto, la textura de las hojas puede ser lisa, rugosa, pubescente, tomentosa, escamosa, etc.

Además de ello las hojas pueden tener consistencia herbácea, papirácea o coriácea, la lámina puede ser plana u ondulada, y su forma, tamaño y nerviación pueden ser muy variables.
En cuanto a su disposición en el tallo pueden ser opuestas, alternas, verticiladas, arrosetadas, imbricadas, etc.

Todo ello supone, pues, que contemos con infinidad de posibilidades a la hora de realizar combinaciones de diferentes texturas para lograr contrastes de lo más diverso.

En el caso del arbolado, la textura de las cortezas de sus troncos puede tener igualmente cierto interés ornamental, pues las hay de muchísimas tonalidades, lisas, rugosas, escamosas, fisuradas, fibrosas, reticuladas, que se desprenden en tiras o placas, etc.

7.2.4. Color y estacionalidad
Menos importante que la forma y textura de las plantas es el color, aunque realmente percibamos formas, texturas y colores al mismo tiempo.

Quiere ello decir que es mucho más importante tener en cuenta la perfecta armonía entre formas y texturas que los colores.

El color llena nuestras vidas y excita los sentidos, pudiendo afectar nuestro estado de humor e incluso nuestros sentimientos, tranquilizando o emocionando nuestro espíritu.

Diverso colorido de las hojas de las plantas
El color puro en el jardín no existe, ya que su percepción depende de las formas y texturas; es algo cambiante, tanto a lo largo del día, con el ángulo de incidencia de los rayos solares, como a través de las diversas estaciones.

Por otro lado, los rayos del sol no inciden de igual forma en todas las latitudes y, por tanto, los colores se perciben de diferente manera, siendo más intensos a medida que nos acercamos a los trópicos.

El círculo cromático, compuesto de 12 colores básicos y basado en los colores del arco iris, puede ayudarnos a entender mejor las teorías del color, que nos serán de suma utilidad en nuestros diseños.

Los colores en cuya composición interviene el azul se denominan "fríos", mientras que reciben la denominación de "cálidos" aquellos en cuya composición interviene el rojo o el amarillo.

Son colores primarios aquellos que no pueden obtenerse por la mezcla de ningún otro.

Son tres, el amarillo, el rojo y el azul.

Se denominan colores secundarios los obtenidos por la mezcla de dos colores primarios a partes iguales.

Son tres, el verde (amarillo + azul), el violeta (rojo + azul) y el naranja (amarillo + rojo).

El verde es el color más importante en jardinería, pues domina gran parte del paisaje.
Es un color que reconforta e inspira tranquilidad. Por si solo, con su infinidad de matices, unido a diferentes portes y texturas, puede constituir todo un variado jardín, como en el caso de las coníferas.

Los verdes oscuros dan sensación de profundidad, mientras que los verdes brillantes dan sensación de luminosidad.

Diverso colorido de las flores de las plantas
Un tercer grupo lo constituyen los colores terciarios, que se obtienen al mezclar en partes iguales un color primario con el secundario más cercano del círculo cromático.

Por ejemplo:

violeta+ rojo = púrpura o violeta rojizo
amarillo + naranja = dorado o amarillo anaranjado, rojo + naranja = escarlata o rojo anaranjado, etc.

Son quizás los colores más abundantes en la naturaleza.

Sabido es que las hojas de muchas especies de árboles y arbustos caducifolios toman bellas coloraciones otoñales que desde el punto de vista paisajístico son muy interesantes.

Ello se debe a la presencia y acción de ciertas fitohormonas inhibidoras del crecimiento que en el otoño, cuando los días van siendo más cortos, aumentan su concentración frente a las fitohormonas estimuladoras del crecimiento, produciendo la ralentización y parada del vegetal, que entra en reposo.

Estas hormonas vegetales son el etileno y el ácido abscísico.

Cuando estas hormonas alcanzan su mayor concentración, la clorofila desaparece y comienzan a resaltar otros pigmentos, como los carotenoides que le dan a la hoja las tonalidades amarillas y anaranjadas, y las antocianinas, que le dan las tonalidades rojizas.

Más tarde, estas mismas fitohormonas serán las responsables de la abscisión del pecíolo, con lo que la hoja cae.

El diseñador debe ser conocedor de estas características y sacarle el máximo partido posible.

Flora autóctona vs. flora alóctona
Una polémica siempre presente, defendida con obcecación por algunos, es la de la utilización de la flora autóctona frente a la flora alóctona.
Estamos de acuerdo en ello, puesto que la flora autóctona siempre está mejor adaptada a las condiciones del lugar, pero la jardinería, que entre otras cosas busca la ornamentación, no siempre dispone en la flora autóctona de las plantas adecuadas para ciertos fines o ciertos efectos estéticos, teniendo que obtenerlas de otras floras lejanas.

Pero la introducción con fines ornamentales de plantas procedentes de otros territorios, puede tener sus peligros cuando se hace de forma incontrolada, puesto que ciertas especies son potencialmente invasoras.

Es el caso de Nicotiana glauca, Pennisetum setaceum, etc., actualmente extendidas por todo el mundo.

En áreas naturales las plantas invasoras pueden reducir el hábitat para especies nativas y amenazadas, compitiendo con éstas, a veces con ventaja, por su facilidad de adaptación.

En otras ocasiones, esas plantas foráneas pueden ser la fuente de introducción de insectos que se constituyen en fuertes plagas, como el caso del "taladro del geranio" (Cacyreus marshalli), extendido por toda España, o de la "mosca blanca" (Aleudoricus dispersus) que tan gravemente afecta a muchos cultivos ornamentales en las Islas Canarias.

Selección de plantas recomendadas para xerojardinería

En líneas generales son aptas para las xerojardinería las plantas de climas mediterráneos, es decir, las autóctonas de nuestro entorno Mediterráneo, de la zona de Chile Central, de la región del Cabo en Sudáfrica, del sur y sudoeste de Australia y de gran parte de California, pues son zonas que comparten muchas características climatológicas y sus plantas han sufrido adaptaciones similares.
Además de éstas, la mayor parte de las plantas denominadas crasas, normalmente originarias de zonas con baja pluviometría, son igualmente interesantes y apropiadas.

Gran parte de la vegetación propia de climas mediterráneos y de otras zonas áridas comparte caracteres tales como abundancia de especies arbustivas de hoja perenne y de plantas anuales...

Hojas reducidas, cutículas céreas, presencia de tomento o escamas, etc., y en casos extremos presencia de espinas, órganos reservorios de agua, ausencia o transformación de las hojas, sistemas radiculares muy potentes, etc.

Todos estos caracteres responden a una finalidad, que no es otra que el aprovechamiento máximo del agua.

6. Mantenimiento adecuado:

Un xerojardín, además de ahorrar agua debe ser respetuoso con el medio ambiente, por lo que la aplicación de productos químicos debe ser la justa y necesaria, tanto en lo concerniente a los abonados como a la lucha contra plagas y enfermedades.

Las podas exigen un mayor consumo de agua a las plantas, por lo que habrán de ajustarse a las mínimas necesarias.

Una plantación en la que se han respetado las distancias acordes con los portes que alcanzarán las plantas exigirá menos podas.

5. Protección del suelo mediante mulching:

El uso de mulching o de plantas cobertoras ofrece ciertas ventajas: disminución de la erosión, conservación de la humedad, reducción de la compactación, aumento de la temperatura del suelo y disminución de malas hierbas, además de un buen aspecto estético.

En el caso de mulching de naturaleza orgánica, en su descomposición aporta mejoras al suelo.
Existen numerosos materiales que pueden utilizarse con este fin, siendo los más empleados y conocidos la corteza de pino entre los de naturaleza orgánica y los áridos y gravas de diversos colores y calibres.

4. Instalación de sistemas de riego eficientes:

Las causas de un alto consumo de agua se deben a menudo al tipo inadecuado de instalación y a un bajo mantenimiento, con pérdidas innecesarias.

En xerojardinería se utilizan sistemas de riego eficientes, como son los de microaspersión y goteo.

Últimamente se está imponiendo el sistema de riego por goteo enterrado y el uso de aguas regeneradas.

En xerojardinería, además de un sistema de riego adecuado, es necesario agrupar las plantas por necesidades hídricas similares.

3. Reducción de las zonas de césped:

Como es lógico, en un jardín basado en el ahorro de agua no deben incluirse grandes superficies de césped, sino las justas y necesarias, normalmente en aquellas zonas más vistosas del jardín y que estarán englobadas dentro de la hidrozona principal.

Hay que tener en cuenta que una pradera de césped, además de un alto consumo de agua, lleva consigo un mantenimiento intensivo y costoso, y en la xerojardinería se busca, además de un ahorro de agua, un ahorro de recursos, tanto materiales como humanos.

Al margen de ello, en las praderas que se establezcan deberán emplearse especies cespitosas con baja demanda de agua y se deberán utilizar sistemas de riego eficientes y muy controlados.

2. Estudio del suelo:

Como en cualquier otro proyecto de jardinería bien realizado, se realizará un estudio de la textura y estructura del suelo y se harán enmiendas si son necesarias o factibles económicamente.

De igual forma se hará un análisis químico del suelo determinando, entre otras cosas, su pH.

Si fuese necesario y permisible se harán las enmiendas adecuadas, aunque es mucho más económico seleccionar las plantas adecuadas al pH existente.

Se tomarán muestras del subsuelo y de la capa superior, ya que el desarrollo radicular se realizará en zonas muy diferentes entre las plantas herbáceas y las plantas leñosas.

El conocimiento de todos estos datos nos permitirá tomar decisiones de abonados y/o estercoladuras de fondo que mejoren la estructura del suelo, así como la selección de aquellas especies adecuadas a las características del suelo.

1. Planificación y diseño:

Como cualquier otro diseño de jardín, el paso más importante y previo a todo lo demás es la minuciosa planificación, para lo que hay que reunir el máximo de información posible relativa a la orientación del terreno, dirección de vientos dominantes, clima de la zona, situación de vías de comunicación, disponibilidad de agua, estudio del terreno y características del suelo (textura y estructura), infraestructuras existentes o próximas, vegetación circundante, perspectivas y puntos de vista, alineaciones, usuarios a los que va destinado el jardín y funcionalidad de éste, etc.

Es obvio pensar que cuantos más datos manejemos y tengamos en cuenta, menos cosas quedarán al azar o a la improvisación, tan frecuente en este país.

Pues bien, teniendo en cuenta todo lo dicho, y sabiendo que la principal finalidad de un xerojardín es el ahorro de agua, haremos la selección de especies vegetales que cumplirán las diversas funciones (tapizantes, pantallas, alineaciones, borduras, etc.), pero siempre eligiendo plantas eficientes en agua, tratando asimismo de agruparlas en zonas con similares necesidades hídricas (hidrozonas).

El tema de la selección de plantas se desarrolla en el apartado 3.

lunes, 8 de marzo de 2010

MANUAL DEL JARDINERO.

Según cualificación:

1. Jardinero: Deberá tener conocimiento o práctica, como mínimo, de las operaciones que a continuación se describen y no tan sólo de una de ellas:
Desfonde, cavado y escarda a máquina.
Preparación de tierras y abonos.
Arranque, embalaje y transporte de plantas.
Plantación de cualquier especie de elemento vegetal.
Recorte y limpieza de ramas y frutos.
Poda, aclarado y recorte de arbustos.
Preparación de insecticidas y anticriptogámicos y su empleo.
Protección y entutoraje de árboles, arbustos y trepadoras, etc.
Utilizar y conducir tractores, maquinaria y vehículos con permiso de conducir de clase B, así como sus elementos accesorios, siendo responsable de su buen uso, limpieza y mantenimiento.
Riegos automatizados.
2. Auxiliar Jardinero: Es aquel/aquella trabajador/a que realiza trabajos consistentes en esfuerzo físico y que no requiere preparación alguna.
Son funciones propias de ésta categoría:
Desfonde, cavado y escarda del terreno a mano.
Manipulación de tierras y abonos sin realizar preparaciones.
Transporte, carga y descarga de planta o cualquier otro género.
Riegos en general.
Limpieza de jardines (zonas verdes, pavimentos, papeleras, instalaciones de agua, etc.).
Siega del césped.
Recogida de elementos vegetales (ramas, hojas, césped, etc.) Conduce los distintos tipos de transporte interno como "dumpers" y análogos.
Cumplimentar todas aquellas instrucciones manuales respecto a sus funciones que reciban de sus superiores o trabajadores de categoría superior.
3. Peón Jardinero: Es aquel/aquella trabajador/a mayor de dieciocho años sin experiencia alguna en el sector.
Ejecuta trabajos para los cuales no se requiere preparación alguna, ni conocimiento técnico ni práctico. Su misión está basada en la colaboración máxima a las órdenes del/de la trabajador/a o trabajadores/as de categoría superior.
La permanencia en esta categoría profesional no podrá superar un año, pasando automáticamente a la categoría superior. Queda a criterio de la empresa la reducción de este tiempo.
4. Aprendiz: Es el contratado para adquirir la formación teórico-práctica necesaria para el desempeño adecuado de la categoría profesional de Jardinero.
5. Vigilante: Tiene a su cargo el servicio de vigilancia diurna o nocturna de cualquier dependencia de la empresa u obra que realice.
6. Limpiador/a: Todo el personal que realice la limpieza de oficinas y servicios de esta actividad percibirá el salario en proporción a las horas de dedicación.
D) Personal de oficios varios:
Son aquellos trabajadores que realizan trabajos complementarios de jardinería, tales como: Ensolados y pavimentos artísticos, colocación de bordillos y escaleras de piedra natural y artificial, en seco o en hormigón ;formación de estanques, muros cerramientos o soportes metálicos o de madera, pilares para formación de pérgolas y sombrajes, etc. ; cerramientos con estacas de madera, puertas, carpintería en la formación de las "casetas de jardinero", empalizadas y formación de pérgolas, etc. ; pintar verjas, instalaciones eléctricas, iluminación de la "casa de jardinero", caseta de perros, pajarera, etc. ; instalaciones de riego con tubería enterrada para conectar mangueras de riego o caño libre o por aspersión ; instalación de canalizaciones de agua de entrada o salida de los estanques o lagos, o surtidores, instalaciones de agua en general, plataformas, anclajes de invernaderos, puesta en marcha de calderas y quemadores, control de calefacción, reparación de invernaderos, montaje de sistema de riego, trabajos de mecánica y soldadura, etc. ; asimilándose al Oficial Jardinero o Jardinero según su cualificación.

LA CREACIÓN DE UN JARDÍN:

Para agrupar eficazmente las plantas, planificar , estructurar un jardín, y utilizar el color, la luz y la textura acrecentando su belleza natural, tenemos que tener en cuenta varios factores:
EL ESTILO

Los jardines como los hogares, poseen muchas atmósferas y estilos distintos, algunos son inmediatamente identificables, como, por ejemplo, un jardín ingles o la escueta elegancia de un jardín japonés.
Pero lo más difícil de todo es, crear un espacio en el cual las especies vegetales se distribuyan de la misma forma que lo hacen en la naturaleza, recreando con nuestra propia intención e imaginación lo que tanto nos deleita en forma agreste.


PROPORCION

Para crear un estilo en su jardín, no hay que olvidar la escala y el tipo de paisajes y estructuras arquitectónicas que lo rodean. Hay que cuidar la relación entre todos los elementos ajenos al jardín y las especies que allí colocaremos.

PERSPECTIVA

Se puede alterar la aparente forma de un jardín creando una falsa perspectiva en el diseño y utilizando los bordes de las distintas áreas (caminos, cuadros, o terrazas) como si fueran ‘líneas’, las líneas horizontales aportaran una mayor amplitud al espacio mientras que las líneas verticales aumentaran su longitud. Para acentuar todavía mas la longitud debe procurarse que las líneas verticales converjan hacia el fondo del jardín. Una hábil colocación de árboles o ramificaciones colgantes intensificará el efecto. Se puede centrar la atención en un punto determinado dentro o más allá del jardín, creando una línea dinámica de movimiento.

SENCILLEZ DE LAS PLANTACIONES

Un error muy común cometido por los jardineros consiste en incluir excesivas variedades de plantas en un área reducida. Conviene realizar una elección restringida dando lugar a un diseño comparativamente sencillo, que recargar con abundancia de especies. Si no se quiere quedar tan limitado procuraremos evitar que un cultivo mixto resulte excesivamente complejo y desdibujado, mediante la elección de un color determinado y la cuidadosa agrupación de distintas variedades de plantas, esto se aplica no sólo al follaje sino también a las flores.

CULTIVOS PROPORCIONADOS

Al planear el diseño, hay que procurar evitar el esquema básico con una mezcla de plantas de todas clases. Pensando más bien en la proporción de las masas y construyendo una estructura en la que incorporaremos hábilmente las ‘plantas clave’. Un jardín es algo más que la suma total de las plantas individuales que crecen en él, por muy hermosa que sea una planta, para crear un conjunto armonioso, es necesario que guarde relación con la que tenga al lado. La forma tridimensional del jardín esta determinado en buena parte por las masas de plantas y su emplazamiento. Debemos descubrir el satisfactorio efecto de las masas de color proporcionando la exquisita relación que estas crean.

PLANIFICACION

Una composición visualmente satisfactoria de plantas incluye varios elementos, observamos las características de las plantas individuales y consideraremos los efectos que dichas características ejercerán entre sí, las formas de sus hojas y flores, el color y la textura. Pensaremos también en el cambio de tamaño de las plantas, una pequeña especie plantada ahora puede dominar el jardín dentro de cinco años. La mayoría de nosotros no nos atrevemos a comprar mas de dos plantas de la misma clase o bien ante la amplia variedad de especies disponibles, no resistimos la tentación de incluir algunas más. Este espíritu de urraca da lugar a que los esquemas de plantación resulten fragmentarios y rompan las sencillas líneas del concepto inicial.
¡El coleccionista de plantas y el diseñador de jardín no suelen ponerse de acuerdo!
Para empezar elija sencillas masas atrevidas, si el efecto parece excesivamente simple, amplíe la variedad para suavizar el conjunto, restringiendo la elección de plantas adecuadas y procurando verlas en su apariencia adulta.

EMPLAZAMIENTO DE LAS PLANTAS

Una disciplina muy útil en el momento de elegir y emplazar las plantas consiste en empezar por las más grandes y seguir con las más pequeñas, eligiendo primero las plantaciones del fondo (telón), y así sucesivamente hasta las más pequeñas. Tenemos que tener especial cuidado en la atención de su desarrollo en el momento de planificar, colocando las plantas de tal forma que tengan espacio para crecer y mezclarse unas con otras, no tenemos que temer que en un principio la plantación resulte demasiado separada.



Reconocimiento de Especies
Nombre
Hábito
Hojas
Flores
Frutos
Ramas
Cortezas

Caracteres para distinguir árboles:

Una breve discusión de la estructura y caracteres de los árboles es necesaria para poder identificarlos, lo que aquí se presenta pretende ayudar a los navegantes sin entrenamiento botánico previo. Es importante recordar que las características son variables y a menudo se superponen con aquellas de árboles estrechamente relacionados. Siempre que sea posible, la identificación deberá estar basada no en un solo carácter, sino, en tantos como sea posible hacerlo.
Definición de árbol

No hay una línea clara de demarcación entre un árbol y un arbusto, y es a menudo difícil ubicar una especie definitivamente en uno u otro grupo. Frecuentemente una especie, con forma de árbol bajo condiciones ambientales favorables, podrá tener forma de arbusto si no se da esa situación. En general la altura, la forma y el diámetro deben tenerse en cuenta al determinar de que tipo se trata. Aqui un árbol es definido como una planta leñosa que tiene un tronco bien definido, una copa más o menos bien formada, una altura mínima de 4,5 m a 6 m y un diámetro de no menos de 5 cm.
Terminología

Aunque para muchos pueda parecer difícil, el uso de términos técnicos en la descripción de caracteres es a menudo necesario para una descripción concisa y más o menos exacta. El uso de los mismos llevará a familiarizarse con los términos más comúnmente usados en el estudio de los árboles.
Las categorías taxonómicas

Una clasificación consiste en el agrupamiento de los objetos en clases que comparten ciertas características, las clasificaciones biológicas comprenden distintas categorías o rangos que son niveles jerárquicos que se incluyen unos en otros, por ejemplo: la división, incluye diversas clases las que a su vez comprende varios órdenes y así. Las categorías básicas en botánica son las llamadas categorías linneanas, por haber sido Linneo quien las utilizara por primera vez en el siglo XVIII, ellas son: división, clase, orden, familia, género, especie.

Nombre:

La mayoría de las especies de árboles han recibido uno o varios nombres comunes, los que usualmente describen algún carácter del árbol ya sea por su aspecto o por el lugar donde crecen y son fácilmente conocidos por la gente, en algunos casos se indica de que lengua proviene el nombre vulgar y su significado entre paréntesis. Desafortunadamente, estos nombres comunes tienen muchas limitaciones. Algunos son meramente locales, otros se aplican a una o más especies totalmente diferentes y otros se aplican a árboles pertenecientes a distintos géneros, debido a esto, mientras los nombres comunes pueden ser útiles y convenientes, es esencial que cada especie tenga un nombre definido, individual, que pueda ser aceptado a través del mundo y no pueda ser aplicado a ningún otra especie.
Los botánicos y científicos han acordado que estos nombres científicos deben ser en latín, ya que ésta es una lengua muerta y no está sujeta a cambio ni a derivaciones terminológicas, así mismo se ha acordado que el nombre de una especie debe consistir de tres partes:

a).- un nombre genérico, que comienza con mayúscula, refiere la especie al grupo al cual pertenece.
b).- un epíteto específico, que comienza con minúscula, la refiere a la especie singular; seguido por:
c).- el nombre completo o abreviado de la autoridad o persona que primero describió la planta.

El nombre genérico y el epíteto específico deben estar subrayados separadamente o en letra cursiva. Así el nombre científico del ''seibo'' es Erythrina crista-galli Linné. Cuando se da el nombre de dos autores, uno entre paréntesis y el otro sin, indica que la especie fue primero descripta por el autor entre paréntesis, y que luego el segundo autor haciendo la revisión de los géneros de la familia o las especies del género, encuentra que el primero ubicó en un rango erróneo a esta especie, consiguientemente efectúo el cambio. Por ejemplo: el ''laurel'' Ocotea acutifolia (Nees) Mez.

Distribución:

Es importante conocer el área biogeográfica de los organismos, muchos de ellos se extienden en su distribución desde fuera de las fronteras de un país, generalmente vehiculizados por agentes de transporte o dispersión como lo son el viento, los animales y el hombre.

Hábito:

Este se refiere a la apariencia general de un árbol, usualmente como es visto desde distancia aunque esto no siempre es posible, como por ejemplo en una selva, el tamaño, la apariencia y forma del tronco, forma densidad y tamaño de la copa, y el número tamaño y dirección de crecimiento de las ramas, son todos factores útiles para distinguir árboles. La copa y las ramas pueden variar mucho en la misma especie, dependiendo si el árbol está creciendo en una lugar abierto o en un parcela densa donde recibe la sombra de sus vecinos.

Hojas:



Debido a que las hojas muestran patrones característicos, ellas son órganos muy útiles en la identificación de árboles y otras formas vegetales. Las hojas consisten básicamente de una porción expandida o lámina y una porción de soporte o pecíolo, algunas pueden no tener pecíolo siendo llamadas sésiles. Las hojas quedan definidas como tales por la ubicación de pequeñas yemas que se encuentran en la axila de la unión del pecíolo con el tallo, de esta forma podemos distinguir: hojas simples, que consisten de una única lámina; hojas compuestas, formadas por varias láminas individuales, llamadas foliolos, la yema axilar en este caso no se encuentra en la base de cada foliolo, sino en la axila del peciolo o raquis que reúne los peciolulos que portan lo foliolos. Las hojas pueden tener un arreglo respecto al tallo de: alterno, opuesto, verticilado. Otras características usadas en la identificación son la forma y tipo de margen, ápice, textura, color, superficie y base de la hoja.
Las especies siempre verdes, o perennifolias, pueden ser identificadas por sus hojas a través del año, mientras que las especies que pierden sus hojas anualmente, o caducifolias, deben ser identificadas por otras características durante los meses de invierno.

Descripción por rasgos y atributos de las hojas:
por la FORMA general del limbo. Lanceolada - elíptica - oval - oblanceolada - oblonga - ovada - acicular - linear
por el MARGEN de la hoja. Aserrado - crenado - entero - dentado - sinuado - lobado - doble aserrado.
por el APICE de la hoja. Cuminado - redondeado - emarginado - obtuso - cordado - truncado por la BASE de la hoja. Obtusa - cuneada - redondeada - agudo - cordado - truncado.

Flores:



Todos los árboles tienen flores aunque frecuentemente ya sea por la altura o el tamaño, no son fáciles de ver o alcanzar. Las flores son los órganos reproductivos por los cuales los individuos de una especie se multiplican. Las características florales son el medio mas preciso de identificar las especies vegetales, aunque en el campo son poco usadas debido a que el período de florecimiento suele ser corto.
Ej: Parkinsonia acueleta (Leguminosas cesalpinoideas) de floración y follaje muy destacado.

Las flores varían mucho en forma estructura y tamaño, una flor completa está conformada básicamente por un conjunto de sépalos que se denomina cáliz (generalmente de color verde), un conjunto de pétalos llamado corola (generalmente de colores), un grupo de estambres que son los órganos masculinos que portan el polen, y el pistilo, el órgano femenino que consiste de un estigma terminal que recibe el polen, un estilo y un ovario. El ovario contiene uno o más óvulos que luego de la fecundación madurarán en semillas. Las flores pueden ser hermafroditas si portan ambos sexos en la misma estructura floral, o unisexuales si sólo llevan estambres en un caso, y pistilo en otro. Por otro lado una planta que tenga flores unisexuales, podrá ser monoica si ambos sexos están presentes en flores diferentes de la misma planta, o dioica cuando cada sexo está en una planta diferente
Ej: Phytolacca dioica (Fitolacaceas) especie dioica.

Frutos:



Aunque varían mucho en tipo y apariencia, los frutos son muy útiles en la identificación de árboles. Un fruto es el desarrollo del ovario de una flor luego de que su/s ovulo/s han sido fecundados.

Ramas:



Ya sea por la forma o disposición las ramas aportan datos para la identificación, es importante prestar atención a las ramas jóvenes, la presencia y color de lenticelas, pubescencia, etc. Las ramas gruesas pueden aportar caracteres para la identificación por la corteza.

Cortezas:



La corteza de los árboles está formada por diferentes tejidos que envuelven la parte leñosa y central del tronco. La porción más externa que observamos está constituida por tejido muerto que termina por caerse con el crecimiento tanto en diámetro como en altura de los mismos.
El aspecto que presenta, ya sea en su diseño, textura y color, así como la presencia de otras particularidades, constituye una característica importante de la corteza. Aunque ésta es variable en aspecto de acuerdo a la edad y al ambiente en el que se desarrollan los árboles, la misma mantiene cualitativamente características que se pueden utilizar para la identificación de las especies. Este hecho resulta de utilidad, por ejemplo, en una selva donde no siempre se suelen ver o alcanzar las hojas y flores de los árboles por el denso follaje o la altura, teniendo en cuenta que tradicionalmente las guías de identificación de especies se basan en diferentes características de flores, frutos y hojas.
La descripción de las cortezas se realizan en días que no hubo lluvias, puesto que en un tronco mojado el color de la corteza varía mucho, tendiendo a aparecer más oscura sobre todo si tiene grietas.
En los árboles que son muy añosos, el aumento en grosor lleva a que los rasgos generales de las cortezas se pierdan cuando se tiene en cuenta el tronco principal, en ese caso, es oportuno prestar atención a las ramas que sí pueden mantener los caracteres generales.

EL SUELO Y SU RELACION CON LAS PLANTAS

COLOR
TEXTURA
ESTRUCTURA
INTERCAMBIO
INDICE PH
CORRECION PH

DEFINICION: Sostén de la vida vegetal y animal, es el cuerpo natural que se forma a partir de los componentes de la corteza terrestre (las sustancias minerales). Es el sustrato natural donde viven las plantas terrestres.

En la naturaleza existen dos tipos de componentes: BIOTICOS, los animales y las plantas y ABIOTICOS, el agua, el aire, y el suelo (que también contienen vida).
El suelo esta compuesto de diferentes horizontes, que los podemos observar realizando un corte en él, veremos diferentes capas, con características distintas entre sí. Los horizontes están relacionados, en la capa más superficial (horizonte A), se encuentra la mayor proporción de materia orgánica; en el horizonte B aparecen arrastres producidos por el agua de sustancias del horizonte A; y finalmente el horizonte C contiene la materia madre de donde proviene el suelo, es decir la roca.

Le llamamos POTENCIA a la profundidad de cada horizonte.
Si representáramos un suelo medio sus componentes estarían en estas proporciones:
SUSTANCIAS MINERALES - 45% (descomposición de la roca madre)
POROS - 50% (contienen alojado el aire y el agua)
SUSTANCIAS ORGANICAS - 5% (descomposición de seres vivos)
Las propiedades del suelo están estrechamente ligadas con la relación SUELO -

PLANTA. Consideramos dos tipos de propiedades:

FISICAS
a) color
b) textura
c) estructura
QUIMICAS
d) capacidad de intercambio
e) PH
PROPIEDADES FISICAS

COLOR - Es una propiedad fácil de apreciar, los colores van de la gama de negros a pardos, pasando por ocres o ferrugineos determinando la mayor cantidad de materia orgánica (negros) o la presencia de hierro o manganeso (ocres).
El escurrimiento rápido con la fuerte acción del agua determina el grado de oxidación dando colores grises y azulados. Los colores claros denotan la existencia de calcio o sodio (excepcionalmente). Siempre el escurrimiento estará determinando el grado de oxidación por lo tanto el color de los horizontes.

TEXTURA - La textura será dada por las porciones finas que contiene el suelo al deshacer un terrón. Existen tres clases de partículas : arena, limo y arcilla.
Dimensiones:
arena - 2 mm a 0.05mm
limo - 0.05mm a 0.02mm
arcilla -de 0.02mm a menos
La textura estará determinada por el porcentaje en que se encuentran las partículas en una porción de suelo.

Suelo franco: los componentes finos se encuentran en iguales proporciones aproximadamente (teórico).
Franco arenoso: proporción mayor de arena.
Franco arcilloso: proporción mayor de arcilla. La formación de un suelo demora decenas de miles de años, por esto precisamente es que tenemos que tener en cuenta, la gravedad que produce la erosión premeditada por parte del hombre que no tiene en cuenta el largo plazo de este proceso natural. La textura tiene importancia en la relación entre el suelo y la planta. El suelo arcilloso es poco permeable y retiene en mayor proporción el agua que un suelo arenoso, tiene mayor fertilidad potencial, es decir que puede proporcionarle a la planta más cantidad de nutrientes. La forma en que esto ocurre esta dada por las pequeñas partículas de arcilla, que tienen la propiedad de cargarse de mínimas cargas eléctricas negativas, y los nutrientes (elementos químicos) con cargas positivas quedan retenidos en las partículas de arcilla, de esta forma los pelos absorbentes de las raíces de las plantas tienen a su disposición estos elementos vitales para su desarrollo. Esta retención de agua no siempre es beneficiosa para las plantas, porque los pelos absorbentes respiran profundamente, y al encharcarse el suelo puede producir amarillamientos y hasta la muerte del vegetal.

ESTRUCTURA - Es la forma en que las partículas finas están ordenadas, formando agrupamientos de distintas proporciones sucesivas, la estructura del suelo esta relacionada estrechamente con la textura.
En los distintos horizontes se pueden encontrar diferentes texturas: prismática, bloques, granular o laminar. La estructura prismática no aparece generalmente en el horizonte A, en cambio podemos encontrar estructuras granulares en este horizonte. La estructura también tiene importancia en la vida de las plantas, el espacio poroso que va a quedar entre las diferentes estructuras, va a determinar los valores de agua y aire, los poros facilitan el crecimiento de las raíces, haciéndose esto dificultoso si el suelo presenta estructuras prismáticas; en algunos casos podemos modificar las condiciones del suelo, al menos las superficiales.

MATERIA ORGANICA - Todos los vegetales necesitan para su desarrollo un alto contenido de materia orgánica. En los nutrientes minerales no está presente el nitrógeno, pero sí en la materia orgánica. La sustancias orgánicas del suelo provienen de la descomposición de seres animales y vegetales.
Los organismos vivos están constituidos por proteínas, que son sustancias cuaternarias porque contienen 4 componentes: carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno. Las plantas al descomponerse liberan el nitrógeno que contienen, formando sales en forma de nitratos, los cuales el vegetal puede absorber. (NO3Ca nitrato de calcio, NO3K2 nitrato de potasio).
Las bacterias y microorganismos que viven en la materia orgánica, juegan un papel importante en la vida de las plantas, determinando síntomas en los vegetales. Ej.: en los cultivos encharcados las bacterias aerobias mueren al carecer de aire determinando también la muerte de la microflora.
El HUMUS es el último estadio de la materia orgánica, rico en ácidos orgánicos suaves (ácidos húmicos), y actúa en las propiedades de agregación de las partículas (estructura), estando también íntimamente ligado a la materia mineral (complejo Arcilla - Humus).
En las leguminosas se producen en las raíces nudosidades de color castaño claro, es una respuesta de la epidermis de la raíz cuando es atacada por bacterias llamadas RHIZOBIUM, estas bacterias toman de los poros de la tierra el aire asimilando el nitrógeno que la planta absorbe, a su vez toman los glúcidos que necesitan directamente de la planta.
POROSIDAD - Es la cantidad de poros por volumen que existe en el suelo, cuanto más poros más materia orgánica, en arenas muy finas la porosidad es baja.
Los poros del suelo condicionan el desarrollo de los sistemas radiculares. Ej.: en canteros florales, con herbáceas de períodos breves, la tierra debe estar suelta para permitir el arraigo de raíces y la fácil absorción de agua y aire.
Las dimensiones de los poros también es importante, existiendo poros de dimensiones capilares, donde el agua no circula, siendo mayor la posibilidad de adherencia que la de percolación; y poros no capilares, que facilitan el drenaje y la aireación. Las raíces van a tomar el agua de los poros capilares. Podemos determinar la densidad del suelo según el grado de porosidad que presente, un suelo con más poros es menos denso que otro con inferior porosidad.
COMPLEJO ARCILLA - HUMUS: La arcilla nunca está totalmente pura en el sustrato, sino que está íntimamente ligada con la materia orgánica. Las arcillas desde el punto de vista material se componen de distintos minerales, estas pequeñas partículas provienen de diferentes elementos, por lo tanto las arcillas serán también diferentes. La arcilla no funciona aisladamente como ya dijimos se fusiona con el producto final de la materia orgánica (el humus).
Los cristales de arcillas cuando tienen cierto grado de humedad poseen cargas eléctricas negativas muy tenues, pero si lo suficientemente fuertes como para retener cargas eléctricas del signo opuesto que están contenidas en las sustancias desprendidas de ciertos minerales, a estas cargas positivas se les denomina cationes, son átomos predominantemente de calcio, magnesio, potasio y sodio.
La arcilla se encuentra dispuesta como en láminas que al penetrar el agua en los intersticios esta se hincha y los cationes de las sustancias minerales se depositan en los vértices del cristal de arcilla.

PROPIEDADES QUIMICAS

CAPACIDAD DE INTERCAMBIO - Esta propiedad química del suelo está estrechamente relacionada con el complejo arcilla - humus, es la capacidad de este complejo de ceder nutrientes a las plantas por intermedio de la captación de partículas minerales que el vegetal posteriormente va a absorber.
FERTILIDAD ACTUAL - Se denomina de está forma a los nutrientes que están a disposición de la planta en el momento, porque existen otros que se encuentran en el suelo pero de manera potencial, están en determinado estado químico que necesitan de un periodo de tiempo para poder ser absorbidos, el vegetal lo toma a largo plazo.

PH (POTENCIAL HIDROGENO) - En términos generales los líquidos o fluidos tienen en consideración la cantidad de hidrógenos libres existentes en una solución, dependiendo de una determinada situación química, teniendo esto en cuenta existe acidez, neutralinidad o alcalinidad.
Por ejemplo el agua destilada es neutra su PH es 7 (PH neutro), en una molécula de agua destilada hay muy pocos hidrógenos libres, para romper la molécula = H+ OH-
En esta tabla se expresan los posibles valores de PH:
14 7 1
básico neutro ácido
Los suelos en general (suelos medios) oscilan entre 4.5 (ácidos) y 7.5 (neutros o ligeramente alcalinos).
Se dan predominantemente en climas áridos PH alcalinos o neutros y en climas húmedos PH ácidos o ligeramente ácidos. En la naturaleza se distribuyen respondiendo a condiciones naturales diversas, los suelos según los materiales con que se formaron van a tener mas o menos neutralidad. En donde las precipitaciones son intensas se produce un lavado, y por percolación se van llevando los elementos que le dan alcalinidad al suelo, el agua va barriendo las sustancias (cationes +), produciendo un suelo preponderantemente ácido. Cuando ocurre lo contrario, en lugares áridos las sustancias se retienen y los suelos son alcalinos.
Existen floras naturales que tienen requerimientos según sus condiciones naturales, se dan una gran cantidad que viven en suelos neutros o ligeramente ácidos, estas se llaman ACIDOFILAS (ej: papa, azaleas),y en suelos básicos (salinos) las plantas que allí encontramos las denominamos HALOFILAS (también denominamos así a las que viven al borde del agua, ej: alfalfa, remolacha). El PH es uno de los principales responsables de la producción de reacciones para que las sustancias nutricias estén a disposición de las plantas, por este motivo existe la CORRECCION DEL PH, siempre dependiendo de las magnitudes a trabajar. *Suelo excesivamente ácido: podemos usar cal (óxido de calcio CaO o carbonato de calcio CaCO3) el ión H- de la molécula se reemplaza por el cation de calcio Ca+, llamamos enmiendas a los encalados del suelo.

Suelo excesivamente alcalino: agregamos azufre (en polvo o molido), primero se oxida y luego esos radicales oxidados toman el hidrógeno del suelo formando H2SO4 (ácido sulfúrico), este se disocia y los H pasan a sustituir las bases de la molécula. Ej: en las hortensias se acidifica con sales de hierro u óxido de hierro (sulfato de hierro).

CORRECIONES DEL PH MEDIANTE RECURSOS NATURALES

TURBA - La turba es la materia orgánica de origen vegetal, se produce por procesos anaerobios (bajo agua), esta descomposición no tiene una oxidación tan profunda, resultando una estructura semifibrosa, dándole un carácter ácido, siendo útil para corregir situaciones de cierta alcalinidad.

MUSGO SPHAGNUM - Para dar acidez podemos utilizar este tipo de musgo, el proceso es más lento. Se produce en cursos de agua no muy rápidos (agua dulce), en lagunas con abnegamientos prolongados pero no permanentes. Se utiliza frecuentemente en reproducción agámica por acodos, pudiendo retener este musgo de 20 a 30 veces su volumen en agua.

TIERRA DE BREZO - Es el mantillo en descomposición de brezos (Flia. Ericaceas, géneros: Erica, Calluna). Para sustituir la tierra de brezo podemos utilizar: mantillo de coníferas, turba o sphagnum.

Las plantas moderadamente acifodófilas en general son las que se cultivan para interior, que viven generalmente en el sotobosque de zonas tropicales, la riqueza de sustancias orgánicas de este suelo implica el grado de acidez necesario para su desarrollo.
BLANQUEALES - Se denominan así a los sectores sin existencia de vegetales, se producen por un problema de textura, estando unidas a las condiciones químicas de los vegetales del lugar. El sodio (Na+) es un agente deshidratante que puede producir PH 4 o 5, habilitando la existencia solo de plantas halofitas.

HUMBRICULTURA - Es un éxito para modificar el suelo el uso de lombrices como mejoradoras del mismo. Las lombrices en un terreno natural comen tierra y evacuan alternando el suelo, modificando en forma favorable el sustrato. Al pasar la tierra por las lombrices le agregan al suelo micronutrientes. El humus son los ácidos húmicos que se incorporan al suelo, lo llamamos HUMUS DE LOMBRIZ. En una hectárea de suelo medio se calcula que las lombrices existentes producen 40 toneladas anuales de excremento, un espesor de 2 a 5 mm de altura de capa por año. Son aproximadamente de 60 mil a 75 mil lombrices. El aporte de humus de lombriz es prácticamente neutro mejorando las propiedades de los cultivos.

DATOS COMPLEMENTARIOS - Las raíces son muy activas en la absorción de sustancias en las partes jóvenes, los contactos con el complejo se hacen por el extremo.
Ejemplos:
Medidas de longitud de raíces Trigo - 80 km. y de una planta de Centeno - 700 km. en 4 meses

ABONOS QUE SE CONSIGUEN EN NUESTRO HOGAR.

CENIZAS USADAS COMO ABONO – Las cenizas de madera son un buen abono orgánico de liberación rápida, estéril, muy rica en potasio. Son muy útiles en el momento de la floración. Puede verterlas sobre los canteros a razón de una palada por metro cuadrado, removiendo luego la tierra. Evite las acumulaciones que modificarían demasiado la estructura del suelo. Las cenizas de carbón también sirven.



CAFE – Favorezca el crecimiento y la textura de la tierra de las plantas con los posos del café. No es la cafeína la que se aprovecha, sino todos los productos residuales que constituyen un excelente abono a condición de que se distribuyan con discreción. Una o dos cucharadas por semana son suficientes. Mezcle bien la borra con la tierra, ya que puede pudrirse la superficie. (la yerba mate usada también sirve).



CASCARA DE HUEVO – La cascara lavada y molida resulta ideal para todo tipo de plantas, así como también el agua donde cocinamos huevos para el riego es recomendable.



OTROS ABONOS ORGANICOS RECOMENDADOS.

RESACA – Es un material que se encuentra a la orilla de los ríos como producto del arrastre de la materia orgánica que produce la corriente de agua. Si la compramos conviene leer en el envase que la contiene cuál es su lugar de procedencia; esto nos ayudará a distinguir el material que proviene de zonas contaminadas y puede, eventualmente provocar enfermedades a las plantas.

HUMUS DE LOMBRIS – Es producido por la Lombriz roja de California que consume materia orgánica con voracidad y la degrada rápidamente. El resultado es un abono de consistencia similar a la tierra negra, muy oscuro y rico en todos los nutrientes. Resulta ideal para las plantas de interior como las de exterior (canteros florales). Recomiendo este abono especialmente.

HARINA DE HUESOS – Es un abono animal rico en fósforo. Es muy necesario en el caso de las plantas con flores porque fija el color de las mismas, fortalece los tallos y produce el crecimiento adecuado de la raíz. Proviene de la calcinación de los huesos.
HARINA DE SANGRE – Otro abono de origen animal y deriva de la depuración de sangre de vaca. Esta indicado para plantas florales y de interior porque favorece el crecimiento, combate el raquitismo y aumenta las defensas contra enfermedades. Para aplicarlo basta con espolvorear los canteros con el producto regando después en abundancia, de manera de acelerar la integración del abono al suelo.

ESTIERCOL – El estiércol se obtiene de las caballerizas o establos y resulta altamente beneficioso. Debe aplicarse en estado completo de descomposición. Su olor y consistencia son similares a los de la tierra negra.

LIQUIDOS HUMICOS – Este abono orgánico se comercializa en forma líquida y es un derivado de las camas de criaderos de pollos. Se lo utiliza mezclado con agua, antes de aplicar conviene remover bien la tierra. Tambien sirve los de criaderos de conejos.

Imagen de jardinero trabajando en vivero.